Minutos antes de que empezara España Chile en el Maracaná, cientos de hinchas chilenos entraron a la fuerza a la sala de prensa, donde se encontraban unos mil periodistas de todo el mundo, rompiendo cosas y robando equipos a su paso.
Hubo caos durante varios minutos ya que el staff de seguridad del estadio no daba abasto para controlar a todos los seguidores del equipo suramericano.
El hecho dejó paredes destrozadas, hinchas detenidos y la sensación de que a este mundial le falta organización. Por lo pronto no sé más, esto lo escribo minutos después de ocurrido todo. Perdonen lo tartamudo, de verdad el asunto era de miedo.