Luciana García sacó 500/ 500 en el último examen Saber 11, calificación con la que entrará a la facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Colombia. Su resultado no fue cuestión de suerte, sino de una serie de hábitos que la han llevado a ser una de las mejores estudiantes del país.
Para empezar, está acostumbrada a despertar entre las 4 y 5 a. m. para meditar o hacer yoga por media hora; luego desayunar cereal con kumis o un tazón de frutas acompañada de café con leche o té, así como un buen pan artesanal y vitamina C. Después, pasa la ruta que la deja en el colegio Liceo de Colombia Bilingüe a las 7:30 a. m.
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En general esta adolescente de 16 años disfruta de todas las materias, incluyendo pensamiento, lectura crítica, ciudadanía y gobierno. Durante las clases muestra un interés genuino por lo que dicen sus maestros; toma apuntes -en especial de aquellas cosas que dice el profesor y no aparece en las diapositivas-. A la hora del almuerzo pide el menú vegetariano y por las tardes cuando llega a casa hace ejercicio; toma una ducha; lee y repasa lo aprendido en el día. Por la noche se reúne con su familia a la mesa para cenar y se va a dormir entre las 9 y 10 p. m.

Los fines de semana practica tenis y aunque no suele ver televisión, sí le gusta una que otra película de estreno, además de compartir y tardear con sus amigos. Actualmente se encuentra becada en su colegio y aunque dice que las calificaciones no la desvela, sí sirven para reflejar su conocimiento actual.
En Diners, conversamos con Luciana García sobre aquellos secretos o prácticas que le funcionaron para tener un puntaje perfecto en la prueba Saber 11:
1. Antes de presentarse a las pruebas Saber 11, ¿se preparó para afrontar este examen nacional? si es así, ¿cómo lo hizo?
Sí, me preparé con las clases de mi colegio, el cubrimiento temático y las preguntas que les hice a mis profesores durante el año. También realicé un curso “pre icfes” con la empresa Formarte. Y además solía hacer práctica estandarizada de preguntas con material que se encuentra gratis en internet.
2. ¿Esperaba obtener este puntaje?
Esperaba obtener un buen puntaje, pero no un puntaje perfecto. Cuando la idea del quinientos pasaba por mi cabeza trataba de ignorarla para no tener que “decepcionarme” cuando saliera el resultado.
3. ¿Cómo se sintió durante el examen? ¿Muy fácil o muy difícil?
Durante el examen me sentí más tranquila de lo que esperaba, me tomé mi tiempo para leer cuidadosamente las preguntas y de hecho las revisé dos veces antes de entregar el examen al final. No creo que haya sido muy fácil, pero sin duda sí sentí que con el contenido y la práctica que había hecho tenía todas las capacidades para responderlo.
4. ¿Tuvo la necesidad de hacer apuntes en las hojas en blanco u operaciones matemáticas, o con solo leer el enunciado encontraba la respuesta?
Sin duda alguna sí. No soy el tipo de persona que responde inmediatamente, sino que prefiero ser muy metódica especialmente en matemáticas, entonces desarrollaba un procedimiento detallado cuando era necesario. También por ejemplo en lectura crítica uno no puede rayar los textos, pero sí me encontré haciendo pequeños diagramas sobre las lecturas para tener claras sus ideas principales.
5. ¿Considera que los enunciados de las preguntas están redactados para enredar la comprensión de lectura de los estudiantes?
No necesariamente para enredar, más bien para poner a prueba su comprensión lectora en situaciones en contextos establecidos en los que la respuesta no suele estar explícita y por ende requiere de un análisis más profundo.
7. ¿Considera que la formación en su colegio tuvo algo que ver con su rendimiento en el exámen?
Definitivamente. Principalmente en el cubrimiento del currículo, pero también por mis profesores, puesto que estuvieron siempre dispuestos a ayudarme con preguntas o temas que se me dificultaban, y supieron adaptar el conocimiento lo suficiente para que yo lo entendiera.
También son unos de los responsables de la confianza que tengo en mí misma y esas razones por las que me sentía capaz de presentar el examen y obtener un buen puntaje. Esa confianza y tranquilidad que ellos me dieron originalmente afecta directamente el rendimiento libera espacio mental y te da otra disposición.
8. ¿Cuál es su metodología para reunir todo el conocimiento que se necesita para esta prueba?
Creo que todos tenemos maneras distintas de aprender, y creo que sí se debe tomar como un proceso de autodescubrimiento, a mí me gusta usar la aplicación en preguntas y la inclusión en discusiones sobre los temas que creo que refuerza el entendimiento del contenido en distintos contextos y niveles de profundidad.
9. En este momento usted entró también a la Nacional, ¿considera que una prueba de este tipo puede definir el futuro de una persona en Colombia?
No creo que defina el futuro de alguien. Sin duda alguna la importancia de la prueba reside en las oportunidades que abre, sin ser la única herramienta para abrirlas, pero también como una herramienta de análisis de la educación en el país es un reflejo de sus problemas, de sus fortalezas y de esas rutas de acción que deben ser tomadas tan rápido como sea posible. La prueba va más allá del individuo y es útil para la sociedad general. Claro está que un puntaje muy bueno además es positivo para el individuo y su futuro, pero a quienes no es muy poco probable que termine determinando si tienen un futuro exitoso o no.
10. Cuéntenos qué le depara a futuro luego de terminar su carrera en Medicina…
Cuando termine la carrera espero poder seguir investigando, en la academia o en la industria, pero investigando. Escribiendo, aprendiendo y descubriendo temas que necesitan ser evaluados en la medicina para mejorar las condiciones de vida de muchas personas.