Turquía es un destino fascinante para los viajeros que disfrutan aprendiendo mientras exploran el mundo y, al mismo tiempo, se maravillan con paisajes llenos de naturaleza y vida. A lo largo de su territorio, ofrece una amplia variedad de experiencias turísticas para todos los gustos. Hoy le hablaremos de una ciudad mágica en el Mediterráneo turco: Antalya.
Antalya fue fundada originalmente como Attaleia por orden del rey Atalo II de Pérgamo. Con el tiempo, bajo el dominio otomano, su nombre evolucionó hasta convertirse en el que conocemos hoy.
A lo largo de los siglos, esta ciudad ha sido la puerta de entrada al Mediterráneo turco gracias a su ubicación estratégica, clave tanto para el comercio como para el turismo. Actualmente, es un destino ideal para quienes buscan tranquilidad y escapadas lejos del bullicio. Desde Bogotá se puede volar directo a Estambul con Turkish Airlines.
En Diners, le contamos cuáles son las experiencias imperdibles en su visita a Antalya, Turquía.
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La puerta de Adriano

Cuando el Imperio Romano se extendía por gran parte de Europa y Asia, el emperador Adriano visitó Antalya. En su honor, los habitantes de la época construyeron una imponente estructura para que “entrara por la puerta grande”.
Hoy, en la ciudad turca de Antalya, cerca del mar Mediterráneo, aún se mantiene en pie la Puerta de Adriano, un monumento erigido en el año 130 d.C. Este sitio es imperdible por su valor histórico y por conservar la arquitectura romana con sus gruesas columnas, integrándose de manera armoniosa con las construcciones modernas.
Este vestigio es un reflejo del legado arquitectónico del emperador Adriano, cuya influencia en la civilización romana y la historia universal se evidencia en obras como la Muralla de Adriano en Britania y el Templo de Venus y Roma.
Cascadas de Düden, un paraíso del Mediterráneo

A las afueras de la ciudad se encuentran las Cascadas de Düden, una de las maravillas naturales de Antalya, cuyas aguas desembocan en el mar Mediterráneo.
Este espacio es ideal para quienes disfrutan de excursiones al aire libre y caminatas de baja intensidad. Sus senderos atraviesan jardines, cuevas y paisajes que ofrecen una vista panorámica de la región, con el característico color turquesa del Mediterráneo como telón de fondo.
La mejor época para visitarlas depende de sus preferencias: en primavera, las cascadas alcanzan su máximo caudal, mientras que en verano el clima es más estable y permite una experiencia más tranquila.
Konyaaltı Beach, una de las playas más hermosas del Mediterráneo

Si disfruta de las playas del Mediterráneo italiano, Konyaaltı le encantará. Con siete kilómetros de extensión, es una opción ideal para refrescarse en verano sin el bullicio de otros destinos más concurridos.
Sus aguas, de un azul vibrante y marea tranquila, tienen una temperatura agradable similar a la del Caribe. Además, es un lugar perfecto para practicar buceo y otras actividades acuáticas.
En sus alrededores encontrará una variada oferta de cafeterías, restaurantes y bares donde podrá disfrutar de la gastronomía local como un auténtico habitante de la región.
Perge, la ciudad antigua de Antalya

Por su legado romano, Antalya alberga la antigua ciudad de Perge, que en tiempos del Imperio Romano pertenecía a la provincia de Panfilia. Según arqueólogos, esta construcción data del año 330 d.C., un testimonio arquitectónico de la Edad Antigua.
Aquí podrá recorrer los cimientos de esta civilización, que combina influencias helénicas y romanas. Entre sus ruinas destacan el teatro, las puertas monumentales y otros espacios que en su época fueron fundamentales para la vida cotidiana de sus habitantes.
Karaalioglu Park, un oasis en medio de la ciudad

El pulmón verde de Antalya. Karaalioglu Park es un refugio natural en el corazón de la ciudad, comparable a los parques centrales de otras metrópolis sostenibles.
Además de su abundante vegetación y flora endémica, este parque es un museo a cielo abierto, con estructuras que datan de más de dos mil años. Desde aquí podrá disfrutar de vistas panorámicas de las montañas que rodean la ciudad o tomar un teleférico hasta lo más alto de Antalya.