Kenneth Cobonpue aguarda sentado en uno de sus deslumbrantes sillones, el Dragnet, en la feria de la moda en Medellín. Luce paciente y joven como buen asiático, pero también sugiere algo divertido de sí mismo con la camisa de verdes y anaranjadas amebas que lleva.
El nido de nudos rojos que ha creado para albergarnos conmueve. Puede ser más que un sillón, un rincón de lectura. Al tiempo resulta el espacio para que una madre se acurruce con sus hijos. Es posible que el amor pueda expresarse con un profundo beso al interior de este recipiente capaz también de albergar dos cuerpos entrelazados. “Mi infancia transcurrió en una casa de la ciudad de Cebu en Filipinas que tenía un gran jardín. Allí mi madre, diseñadora, tenía su taller y yo crecí jugando con los restos de un montón de materiales”, recuerda. El inicio de la vida, los primeros años, el lugar del no retorno.Cobonpue habla en presente pero es su pasado.
Fue brillante como estudiante en el Pratt Institute de Nueva York y luego trabajó como diseñador industrial en Italia y Alemania. Cuando regresó a su isla, lo tuvo claro: tenía que incorporar la delicadeza y maravilloso trabajo artesanal filipino al mundo, a través de procesos industriales. Concentrado en la naturaleza y en los viajes, Cobonpue va por el mundo nutriendo todo lo que él es como persona. Luego toca con sus manos el ratán, la abbaca (un árbol de la familia del plátano, conocida por su resistencia máxima, que es utilizada para fabricar el papel moneda en el mundo) y el bambú. Ahí comienzan a surgir los milagros: los sofás Hagia, la silla Lola, la silla Luna, el sillón Bloom, el vehículo Phoenix.
Esa luz que Cobonpue ve, llega a Colombia de la mano de Matisses, una empresa paisa que cuenta con almacenes en centros comerciales de Bogotá y Medellín y que está empeñada en conquistar al público con estos mobiliarios de sorprendente diseño. Según Juan Camilo Botero, su director ejecutivo, “si uno se viste y come de una manera, también elige cómo quiere vivir en casa. Kenneth Cobonpue trae la moda a la vida cotidiana”.