¿Le gustaría hacer una secuela de “Descendientes”?
– Si pudiera predecirlo… me divertí tanto haciéndola. Es mi quinta película con Disney Channel, y me divertí tanto trabajando en este proyecto. “Descendientes” fue única y me ofreció desafíos increíbles y diversión, así que espero que así sea. Los personajes, los temas, la producción… fue un mundo fantástico en el que actuar, y me encantaría volver a hacerlo, pero no se pueden predecir los fenómenos. Dependerá de qué sienta el público por la película. Estoy entusiasmado; todos estamos entusiasmados y tenemos los dedos cruzados. Definitivamente me encantaría hacerlo de nuevo.
¿Cómo es trabajar con actores adolescentes?
– Me da gran alegría trabajar con profesionales adultos y, en el caso de “Descendientes”, tuve la oportunidad de trabajar con Kristin Chenoweth, que fue nominada recientemente a un Premio Tony, con Kathy Najimy, que interpreta a la Reina Malvada —y trabajamos juntos en “Hocus Pocus” hace 20 años—… es emocionante trabajar con actores experimentados y maduros, pero también me da placer poder trabajar con actores jóvenes. Su apertura… Están dispuestos a confiar y a arriesgarse contigo. Y su entusiasmo por aprender, crecer y llegar a ese lugar con su personaje. Disfruto las dos cosas, pero trabajar con gente joven es realmente una gran alegría en mi vida. Me encanta.
¿Cuán importante es para usted producir cosas para un público adolescente? ¿Por qué vuelve a eso después de “High School Musical”? ¿Qué le hace contar historias que atraen a los adolescentes?
– Cuando hicimos “High School Musical”, los programas de arte en las escuelas de todos los Estados Unidos estaban cerrando, y “High School Musical” inspiró a otra generación a luchar para tener arte en la escuela. De pronto, se hicieron cientos y cientos de producciones en vivo de “High School Musical” en escuelas secundarias de todo el país. Cada vez que me daba vuelta, escuchaba que se estrenaban otras 10. Me gusta hacer un trabajo que genere inspiración, que sea entretenido y divertido, pero lo que más me importa es tener temas subyacentes a la historia que sean importantes, inspiradores y que importen, y eso es lo que me atrajo de “High School Musical”. Y, de nuevo, lo que me hizo querer ser parte de “Descendientes”. También la emoción para mí y el desafío de dirigir “Descendientes” era que, de pronto, me dieron un guión que incluía a personajes herederos del imperio de Disney y el desafío de ser parte de la creación y el desarrollo de personajes nuevos. Así que fue una combinación de cosas lo que me hizo volver para ser parte de esto.
¿Le gusta hacer bromas durante las filmaciones?
– No soy bromista, no sé contar chistes, pero me encanta estar al tanto de una broma. En realidad, fueron los mismos chicos los que idearon muchas cosas graciosas en el plató, mantuvieron el ambiente divertido, y esto es lo que soy yo. Me gusta darles a los actores un ambiente para trabajar que sea divertido y que ofrezca espontaneidad y alegría, momentos cómicos. Cuando tienes a todos los adultos y a un grupo de jóvenes, puede ponerse divertido. Tener ese tipo de energía en un plató aporta algo al proyecto general. Los niños se divirtieron muchísimo todos los días; algunos de los actores eran muy jóvenes, así que imagínate toda la diversión que brindaban. También creo que hay algo que existe debajo del trabajo que yo hago y debajo del trabajo de otras personas, y es la atmósfera que puedes brindar, que puede afectar el desempeño y la energía que se ve en pantalla, realmente lo creo. Para mí, es importante crear un ambiente. Aunque tengo un cronograma y la responsabilidad de que hay que hacer el trabajo, es importante para mí que las personas se diviertan al trabajar.
¿Cómo crea una película así? ¿Comienza con la música y el baile, o primero con el guión?
– Ninguna de las películas que hice comenzaron con la música, sino que comenzaron con el guión y una idea. Ese fue el caso con “Descendientes”, era una película para televisión con un guión escrito maravillosamente por Josie McGibbon y Sara Parriott, y, cuando lo leí, supe que quería ser parte del proyecto. Y el desafío de poder trabajar con la herencia clásica de personajes de Disney, como Maléfica, Cruella, la Reina Malvada, Jafar, el Hada Madrina, y Blancanieves, Bella y Bestia… Esa fue una gran responsabilidad, la forma en que trabajaría con ellos en un cuento de hadas contemporáneo. Y también ese guión me hablaba a mí, y a mis socios aquí de Disney Channel, y nos dijo el lugar en que la producción de música y baile podría querer ser parte de la narración de la historia.
Entonces trabajamos para crear un arco, como un borrador de la manera en que la música y el baile podían ayudar a dirigir e impulsar la historia, y, luego, hablamos con un grupo increíblemente talentoso de compositores y letristas, y comenzamos con el desarrollo de la música. En cuanto a la coreografía, tuve un gran socio: Paul Becker, un coreógrafo canadiense maravilloso, y tuvimos un grupo de asistentes fabuloso. Y todos juntos trabajamos durante 3 semanas con el elenco en el desarrollo de la coreografía y la producción musical, la grabación, los ensayos…
¿Cree que la tradición latina, y hasta española, se está volviendo menos estereotípica y más un personaje normal en las historias norteamericanas?
– Me estoy preparando para producir el 30° aniversario de los premios Imagen de este año, que es una fundación que ha apoyado la voz latina en el arte, la cultura, el gobierno. Y yo, personalmente, a lo largo de los años, he visto una nueva concientización, más oportunidades, cómo se rompen estereotipos. Pero también creo que todavía hay mucho por hacer para abrir oportunidades para todos los grupos étnicos y la forma en que se representan. Pero sí, sí creo… ya que soy un norteamericano hispano que creció durante una época en que sentí prejuicio e iba a ser difícil para mí salir al mundo. Y tuve una carrera fabulosa, oportunidades sorprendentes y trabajé en todas las áreas de la narración de historias para todos los grupos demográficos y todas las culturas. Así que deseo eso para todos nosotros y veo que sucede con más frecuencia en nuestra industria.