Aquí algunos datos de esta película que usted debería saber antes de su estreno:
Para empezar la presencia de Miles Teller, un joven protagonista que poco a poco ha hecho una carrera en Hollywood y ahora con este performance resuena literalmente El esfuerzo del actor para lograr ser un baterista creíble y talentoso tiene frutos. Teller tomó clases inmediatamente aceptó su papel 4 horas a la semana por meses. No salió ni socializó durante un tiempo para estar muy preparado hasta físicamente pues después de su papel en Divergente estaba en buena forma y lozano, y el director de Whiplash necesitaba un tipo escuálido y pálido.
Teller vio videos de talentosos bateristas y no paró hasta conseguir un buen nivel para interpretar Andrew Neiman. Si usted no se ha dado cuenta hasta aquí quien es este actor, échele un ojo al “remake” de Footloose de 2011, Two Night Stand y a That awkward moment. En esta última, Teller se roba el show aunque la “estrella” de la película es el ídolo adolescente Zac Efron.
Perderse el solo final de este actor en honor a Buddy Rich – famoso baterista- no se perdona.
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Por otro lado, el nombre de la película nos remite a una canción titulada igual por el famoso músico de jazz Hank Levi, este maestro era saxofonista. El éxito de la canción se debió a que tenía como músico invitado al trompetista Don Ellis. Además de esta joya también suenan otros clásicos como Caravan de Duke Ellington. Como su banda sonora es el ritmo de lo que vemos, como el jazz de las Big Band que es rápido y perfecto, lleno emoción y de puntos que aceleran el corazón.
El director, Damien Chazzelle tiene solo 30 años y ya dejó a todos con la boca abierta. Whiplash se estrenó en Sundance en 2014 y ese mismo día Sony decidió adquirir los derechos de distribución por todo el globo. Antes de esto dirigió un musical ya premiado: Guy And Madeline On A Park Bench. Vale la pena aclarar que no solo es el director, también escribió el guión así que no todo es casualidad, por algo compitió en los Oscar como mejor guión adaptado: Whiplash se derivó de un corto que el mismo Chazzelle dirigió en 2013.
El joven director dice que la historia tiene algo de personal, pues el jazz como ambiente laboral le parece muy hostil.
Y para terminar, J.K. Simmons hace un papel magnífico como “el malo del paseo”, el profesor que hace sangrar entre los platillos al alumno. El maestro enseña en el renombrado conservatorio Schaffer de Nueva York y es el director de la big band del lugar.
Esta interpretación le dio un Oscar, un Globo de Oro y un BAFTA. La obsesión es el motor de este personaje aunque se interpone la violación a la decencia humana en su camino y esto lo hace un villano admirable con una frase bandera ¨no existen dos palabras que hagan mas daño que ‘buen trabajo’¨.
No se doblegó nunca y tal vez por eso Simmons arrasó con todos los premios encarnando al mentor Fletcher.
Por todas estas cosas que reunidas hacen una gran obra no se pueden perder esta historia en la que los platillos de una batería tienen sangre sudor y lágrimas.